La historia argentina puesta sobre las tablas
17.09.2013 00:10
La obra de teatro Agentes del desquicio usa como detonante La masacre de Ezeiza para mostrar las contradicciones de la época
(Por Alina Dondo) 20 de junio de 1973. Perón regresaba al país después de 18 años y parecía que la calma volvería a reinar en una Argentina violenta y militar. Sin embargo, la vigilia de casi cuatro millones de personas en Ezeiza ni siquiera llegó a ser un acto. Un violento tiroteo entre peronistas de derecha e izquierda dio como resultado más de trescientos muertos y una nueva incertidumbre en lo que podía venir.
En ese acontecimiento denominado históricamente La masacre de Ezeiza se para la obra de teatro Agentes del Desquicio. Juan Pablo Giordano y Pablo Fossa, dramaturgos de la ficción, decidieron retroceder cuarenta años y recrear la realidad. Un hecho puntual protagonizado por Leonardo Favio da origen a la cuestión: el cantante fue el designado para conducir el acto que nunca se llevó a cabo.
Según él mismo contó, durante esa tarde se enteró que en el hotel Internacional de Ezeiza tenían prisioneros a una veintena de jóvenes de la juventud peronista para interrogar y "apretar". Favio se hizo presente en el lugar, y prometió no decir nada si liberaban a los militantes. Esta anécdota resultó llamativa e interesante para los creadores, que decidieron darle vida y humanizar a esos ex militares con diálogos desopilantes que tienden a sospechar unos de otros como infiltrados de esa operación.
Jorge Ferrucci, Gustavo Di Pinto y Ariel Hamoui representan a los peronistas de derecha que a sus disparos y discusiones les suman la presencia de una joven peronista de izquierda (Cecilia Lacorte). Su actitud desafiante y su constante provocación despierta lo peor de estos hombres: logra mostrar una realidad y hasta ridiculizar a estos representantes de la historia más triste de Argentina.
Puertas adentro, los militares no demuestran tanta seguridad como sí lo habían hecho horas antes con un arma en la mano. Sólo "matar zurditos" es su objetivo. En esta hora de violencia, discusiones, desconfianza y golpes de puertas, Almada (Ferucci) se destaca con fuertes monólogos.
"En ese momento eran todos peronistas e igual se peleaban", dijo Juan Pablo Giordano. "La historia argentina tiene muchas contradicciones, no se sabe cómo explicarlas. Yo voy a ponerlas en escena, a darle al espectador los nombres claves y que al terminar saque sus propias conclusiones. Que investigue y amplíe sus conocimientos o se quede con la ficción", explicó. Agentes del Desquicio es la cuarta parte de la saga Argentina Arde, la historia de la nación a partir de 1955 puesta sobre las tablas para poder marcar mojones de cómo se llegó al golpe de Estado de 1976.
Producciones audiovisuales realizadas especialmente para la obra ubican al espectador presentándole personajes de suma importancia del país. La tecnología como intermediaria no altera el producto representado en 1973. El diseño del espacio donde se lleva a cabo implica una cercanía extrema del público con los actores. Las miradas en las escenas más fuertes llegan con más ímpetu a quienes disfrutan de la obra.
Agentes del desquicio se presenta todos los sábados, a las 22, en el Teatro La Morada.
———
Volver